Cuando te encuentras en el pueblo Blancafort (Conca de Barberà) en una tarde de verano te preguntas si estás en un pueblo fantasma y eso lo hace tan especial como los vinos de Jordi Llorens.

En nuestra visita a la viña y la bodega, Jordi se demuestra una persona tan dedicada a la viticultura que te embriaga con sus nociones sobre la geología y la sensibilidad por las cosas bien hechas. Es muy fan de la crianza en tinajas de barro y sus vinos tienen una fuerte personalidad y te sorprenden desde el primer trago.

Frescura, elegancia y aromas a zumo de uva. Tan claro y sencillo como tiene que ser un buen vino.

• Certificado ecológico
• Toda la uva cultivada es de propiedad
• 12 hectáreas totales
• La uva es cultivada según principio de agricultura ecológica
• La vendimia es manual
• No hay riego de la viña
• No se usa ningún aditivo o levadura comercial
• 10.000 - 15.000 producción de botellas anual